Según el informe preliminar, en la camioneta viajaban ocho personas, en su mayoría menores de edad, y unidades del Sistema 9-1-1 y la Policía Nacional acudieron de inmediato para brindar asistencia y coordinar el traslado de las víctimas a distintos centros de salud de la ciudad.
Entre los fallecidos se encuentra un adolescente de 16 años que murió en el lugar del accidente, otro de 17 años que falleció mientras recibía atención en un centro privado, y el conductor, un menor de 16 años, quien perdió la vida en el hospital José María Cabral y Báez.
Los cinco heridos permanecen ingresados en diferentes centros médicos. Tres de ellos, incluyendo un joven de 18 años fuera de peligro y dos en estado delicado en la Unidad de Cuidados Intensivos, reciben atenciones en una clínica privada, mientras que otros dos adolescentes permanecen bajo cuidados intensivos en otro hospital.
El accidente ha generado gran conmoción en Santiago, por la corta edad de las víctimas, y testigos relataron escenas de angustia y llanto de familiares al enterarse del siniestro.
Las autoridades de tránsito mantienen investigaciones para determinar las causas exactas del accidente, mientras la ciudad enfrenta el impacto de la tragedia.
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