Los centros de votación se han llenado de dominicanos de todas las edades y procedencias, quienes, a pesar del calor y la espera, han mostrado su entusiasmo y compromiso con el ejercicio democrático. La diversidad de vestimenta reflejó el carácter relajado y familiar de la jornada, con muchas personas optando por comodidad y practicidad en su atuendo.
En numerosos centros de votación, se pudieron observar mujeres con tubis y rolos, mientras que los hombres prefirieron bermudas y camisetas. Este tipo de vestimenta, común en el día a día del dominicano, no restó seriedad al acto electoral, sino que mostró una faceta más cercana y humana de la ciudadanía, que no quiso dejar pasar la oportunidad de votar, sin importar su apariencia.
Los votantes expresaron su entusiasmo por participar en un proceso que consideran crucial para el futuro del país. Muchos compartieron sus razones para votar, destacando la importancia de la participación cívica y el deseo de ver cambios positivos en la nación.
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