El dispositivo combina 22,794 miembros de la Policía Nacional y más de 5,000 de las Fuerzas Armadas. Estarán en servicio desde este miércoles 3 de diciembre de 2025 hasta el 10 de enero de 2026.
La operación incluye patrullaje reforzado en zonas comerciales, áreas residenciales, avenidas, terminales de transporte y destinos turísticos, con el objetivo de prevenir delitos y reducir conflictos propios del período festivo. El centro de mando funcionará 24 horas para responder emergencias y coordinar las unidades en terreno.
Interior y Policía detalló que la presencia en las calles pasará de 19,000 a casi 25,000 agentes activos con la integración de nuevos miembros, mientras que el dispositivo completo, sumado a las Fuerzas Armadas, supera los 27 mil efectivos.
El operativo también se apoya en instituciones como la Procuraduría General, Salud Pública, Medio Ambiente, DNCD, COE, 911, ayuntamientos, Defensa Civil, Cruz Roja y cuerpos de bomberos.
Según las autoridades, la intención es mantener una vigilancia disuasiva que permita controlar puntos críticos y anticipar incidentes mediante el uso de mapas de calor e inteligencia territorial. La Policía Nacional aseguró que sus unidades cuentan con equipos reglamentarios, dispositivos no letales y cámaras corporales.
El presidente de la República, Luis Abinader, quien encabezó el lanzamiento del operativo, recordó que los agentes han sido entrenados de la mejor manera como parte del proceso de reforma de la Policía Nacional, y afirmó que el Gobierno confía plenamente en su capacidad para cumplir con excelencia la labor que se les ha asignado.
De su lado, la ministra de Interior y Policía, Faride Raful, afirmó que la mayor cantidad de uniformados en las calles forma parte de un cambio profundo en la estrategia de seguridad, donde ya no se espera que ocurra un delito para actuar, sino que se utilizan sistemas de inteligencia territorial que permiten concentrar los recursos antes de que aparezca el riesgo. “Eso es prevención real, no retórica”, afirmó.
Raful destacó que este avance se suma a los resultados obtenidos en 2024, cuando el país alcanzó una tasa de 9.58 homicidios por cada 100,000 habitantes, la más baja en casi una década. Indicó que detrás de esa cifra existe un trabajo deliberado desde el gobierno, pero también miles de decisiones correctas tomadas por comunidades y familias que confiaron en el proceso.
Señaló que en este año han rectificado acciones, mejorado sus procedimientos y utilizado los indicadores del mapa de calor para responder con mayor precisión a las necesidades del territorio. llamó a la corresponsabilidad ciudadana, recordando que la seguridad no depende solo del Estado y señaló que el país puede poner todos los uniformes en las calles, pero si cada persona no asume su rol, el esfuerzo se queda corto.
“La paz no se decreta, se construye entre todos, decisión por decisión” y concluyó deseando que estas fiestas encuentren al país unido y que en enero las familias puedan decir: “Lo logramos juntos
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